El maestro de la Telecaster

Por Sergio Ariza

James Burton solo necesitó tres guitarras y menos de 18 años para inscribir su nombre con letras de oro en la historia del rock and roll. Para ese momento ya había escrito uno de los riffs más famosos de todos los tiempos y se había convertido en el hombre que completaba el póker de grandes guitarristas del rockabilly junto a Scotty Moore, Carl Perkins y Cliff Gallup. Pero eso solo era el inicio de una carrera que le convertiría en el maestro de la Telecaster y en la que dejaría huella con su estilo único en legendarias grabaciones de gente como Ricky Nelson, Johnny Cash, Merle Haggard, Gram Parsons, Emmylou Harris, Jerry Lee Lewis, Elvis Costello, Roy Orbison y, por supuesto, el mismísimo Rey Elvis.  

James Burton nació un 21 de agosto de 1939 en Shreveport, Louisiana, muy cerca de la frontera con Tejas, un pueblo sureño perdido en medio de la nada donde el joven comenzó a enamorarse de la guitarra a través de las ondas de radio. Sus primeros amores fueron los que le marcaron, el blues de Muddy Waters o Howlin' Wolf, y el country de Hank Williams, Lefty Frizzell o su ídolo Chet Atkins. Siendo un adolescente en un estudio de Memphis un grupo de jóvenes blancos iba a mezclar las músicas de sus amores para dar vida a un nuevo estilo de música, el rock and roll. Ese estudio era Sun y esos jóvenes estaban comandados por un camionero de Tupelo llamado Elvis Presley. Ese primer estilo se conoció como rockabilly y entre los que lo perfeccionarían estaban el propio Elvis, Jerry Lee Lewis, Roy Orbison o Johnny Cash. Todos ellos terminarían llamando a Burton en algún momento de su carrera. Pero no adelantemos acontecimientos, de vuelta en Shreveport el amor de Burton por la música hizo que sus padres le compraran a los 13 años su primera guitarra, una Silvertone acústica, al poco, impresionados por su habilidad, los Burton adquirían su primera eléctrica, una Rex imitación de una Gretsch, pero esta iba a durar solo unos meses. El tiempo necesario para que el joven James se enamorara de la guitarra a la que iba a permanecer fiel toda su vida, una Fender Telecaster. Fue amor a primera vista, la vio colgada del escaparate de la única tienda de instrumentos del pueblo y decidió que tenía que ser suya, era larga y delgada, roja y del año 53. Fue a su casa y no paró hasta conseguir que sus padres se la compraran. Ya había encontrado su guitarra, ese mismo año, encontraría su sonido.
 

  

El 16 de octubre de 1954 Elvis Presley, junto a Scotty Moore y Bill Black, hizo una incendiaria actuación en el Louisiana Hayride, el programa de radio (y posteriormente) de televisión más importante de Louisiana que, casualmente, se grababa en Shreveport. Burton estaba allí y fue una revelación para él, como les pasaría en breve a la mayoría de jóvenes de EEUU y, posteriormente, del mundo se vio infectado por la fiebre del rock and roll. Uno de esos jóvenes fue Bob Luman, un cantante country que se convirtió al rockabilly y convirtió a Burton en su mano derecha, otro fue Dale Hawkins junto al que Burton grabaría una de las canciones más importantes de la historia del rock. A pesar de no recibir ningún tipo de crédito en su composición el insigne riff de 'Suzie Q' fue obra de Burton y su Telecaster del 53. Le había salido como una combinación del estilo de Atkins y un sabor mucho más blues. Luego Hawkins le añadió la letra y la melodía y juntos la grabaron a comienzos de 1957, tiempo después los Stones o la Creedence caerían rendidos ante su embrujo. Pero serían sus singles junto a Luman los que le convertirían en una estrella. Tras la magnífica 'Red Cadillac And A Black Moustache', a Luman le ofrecieron participar en una película llamada 'Carnival rock'. Burton fue con él a California y allí aprovecharon para grabar 'My gal is red hot'. Mientras lo hacían, otro joven enamorado del rock and roll les escuchó y quedó fascinado con el guitarrista. Se trataba de Ricky Nelson, una estrella adolescente con tres 'top ten' a sus espaldas que buscaba músicos jóvenes para actualizar su sonido. Luman no podía competir con la oferta de Nelson y Burton pasó a convertirse en la mano derecha de este. Tanto es así que tras aceptar el trabajo Burton pasó a vivir con Ricky y sus padres durante dos años. Estos tenían un programa televisivo y Ricky y James Burton solían finalizarlo con una actuación musical.
 

Pero en el estudio Burton tuvo que luchar contra los prejuicios de la vieja guardia, hasta ese momento el guitarrista principal de Nelson había sido el renombrado guitarrista country Joe Maphis, así que en su primera sesión, en diciembre de 1957, que dio como resultado 'Waitin' In School' y 'Stood Up', Burton solo se encargó de la rítmica. Pero eso iba a cambiar rápido, Burton seguía mejorando su técnica y salió con una innovación que afectaría mucho a su estilo, reemplazando las primeras cuatro cuerdas por cuerdas de banjo y afinando las otras dos de otra manera, siendo mucho más fácil hacer los 'bends' de este modo. El resultado no se iba a hacer esperar, a comienzos de 1958 Nelson grabó 'Believe What You Say', con Burton como guitarrista principal por primera vez. Solo hizo falta esa canción para saber que el rockabilly había encontrado su tercera gran pareja cantante y guitarrista, tras las formadas por Elvis y Scotty Moore, y Gene Vincent y Cliff Gallup. Su siguiente grabación, 'Poor Little Fool', fue el primer número 1 de la carrera de Nelson, con Elvis en el ejército, era la nueva cara del rock and roll, aunque para muchos su principal arma era su guitarrista. No en vano, tiempo después, Keith Richards afirmaría "yo no me compraba discos de Ricky Nelson, me compraba discos de James Burton".
 



Entre las canciones más destacadas de su colaboración se pueden destacar 'Lonesome Town' (con Burton a la acústica), 'Travelin' Man', 'Hello, Mary Lou', 'It's Up to You' o 'Fools rush in' pero para 1964 con la explosión de la 'beatlemania' la carrera de Nelson comenzó a declinar. Burton tenía un contrato en exclusiva con él pero viendo que las actuaciones iban en descenso comenzó una próspera carrera como músico de sesión, en poco tiempo se convertiría en uno de los guitarristas más demandados, codeándose con los míticos miembros de la Wrecking Crew como Hal Blaine o Glen Campbell. Su gran oportunidad le surgió cuando Johnny Cash le llamó para que le acompañara a un nuevo programa de televisión llamado 'Shindig!', le quería tocando el dobro, un instrumento del que también era experto, además de la 'steel guitar'. El productor del programa era una gran fan del trabajo de Burton con Nelson así que le pidió que se quedara en la banda fija del programa, siendo el guitarrista principal de lo que se conoció como los Shindogs, una de las más prestigiosas bandas de estudio. Ayudado por la alta visibilidad del programa, donde pudo tocar con otro de sus ídolos como Muddy Waters, además de Ray Charles, Howlin' Wolf o Chuck Berry, Burton se convirtió en uno de los guitarristas de sesión más cotizados, participando en sesiones de gente como los Everly Brothers, los Monkees, Nancy Sinatra, y cientos más, con un ritmo de unas cuatro a seis sesiones diarias. Se podrían destacar canciones como el 'A child claim's to fame' de Buffalo Springfield, en la que añadió un maravilloso pasaje con el dobro o el 'Someday soon' de Judy Collins, donde su Telecaster interactúa a la perfección con la 'pedal steel' de Buddy Emmons.
 

Pero si hay algo que destaca de este periodo es su acercamiento al country junto a los creadores del 'sonido Bakersfield', Buck Owens y, sobre todo, Merle Haggard. Se puede considerar a la Telecaster de Burton parte fundamental de ese sonido que reaccionaba contra el acaramelado sonido de cuerdas de Nashville. Sus famosos 'licks' con su estilo 'chicken pickin' están en primera línea de canciones como 'Open Up Your Heart’ de Owens e hitos de la carrera de Haggard como 'The Lonesome Fugitive', 'Workin' Man Blues' o la inmortal 'Mama tried'. Ese mismo año, 1968, Burton dijo no a un Rey y a un futuro Nobel de Literatura. En poco tiempo Burton rechazó salir de gira con Bob Dylan y declinó aparecer en el especial de regreso de Elvis Presley, debido a que estaba grabando con Frank Sinatra. Con Dylan no hubo una nueva oportunidad pero el Rey no aceptó un no por respuesta una segunda vez.
 

Tras el éxito de su regreso televisivo Elvis decidió volver a los escenarios y poner al frente de su nueva banda, la TCB Band, a James Burton. Este no pudo decir que no y el 31 de julio de 1969 estaba al lado del Rey en su primer concierto desde 1957. Elvis se moría de nervios pero Burton le dio el consejo definitivo: "Todo lo que tienes que hacer es salir ahí". Tenía razón, aquel hombre había nacido para pisar un escenario y su regreso fue por todo lo alto, desde el comienzo con 'Blue suede shoes' hasta el final con 'Can't Help Falling in Love'. Elvis seguía siendo el Rey y Burton fue su mejor escudero hasta su muerte. No se perdió ningún concierto y grabó junto a él clásicos como 'The wonder of you' (su favorita), 'Burning love', 'Patch it up' o 'Promised land'. Y aunque no tocó con Dylan hizo que Elvis grabara una espléndida versión de 'Don't think twice it's all right'. También fue con Elvis cuando apareció la guitarra con la que más se le asocia, la Paisley Pink Telecaster.
 

Pero la carrera de Burton no terminó con Elvis, también tuvo tiempo para grabar los dos discos en solitario de una de las figuras más importantes del country rock, Gram Parsons. Se habían conocido en una grabación de los Byrds y Burton no dudó en acompañarle en los míticos 'GP' y 'Grievous angel' en los que se puede notar la enorme satisfacción de Parsons de poder contar con el legendario guitarrista, llamándole varias veces por su nombre. Si bien los discos de Parsons no tuvieron ningún éxito comercial se convertirían con el tiempo en claves, ayudados por el éxito de Emmylou Harris, miembro de su banda, y encargada de difundir su música. Su carrera en solitario sería brillante y no dudó en contratar a Burton para ponerle al frente de su Hot Band en discos como 'Pieces of the Sky' o 'Elite Hotel'. En directo Harris buscaba los huecos de las fechas de Elvis para poder contar con Burton pero cuando su éxito hizo que tuviera que elegir, Burton fue fiel a Elvis.
 

Después de la muerte de este, su carrera no declinó lo más mínimo, fue parte de la banda de John Denver, además de la de Jerry Lee Lewis, tocó con el otro Elvis (Costello) en uno de sus clásicos de los 80, 'King of America' y en 1987, junto al resto de la TCB Band de Elvis, fue uno de los acompañantes de Roy Orbison en su especial 'A black & white night'. En ese especial aparecía gente como Elvis Costello, Tom Waits, K.D. Kang o Bruce Springsteen cantando junto a Orbison. Pero, como apuntaba Springsteen, el placer era doble "no todos los días tiene uno la oportunidad de cantar con Roy Orbison y tocar la guitarra con James Burton".

Página web oficial de James Burton
(Imágenes: 
©CordonPress / www.james-burton.net)


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