Al Estilo De Mick Taylor
Por Miguel Ángel Ariza
A los 16
años debutó en directo como guitarrista de los Bluesbreakers de John
Mayall sustituyendo a un tal Eric Clapton, a
los 17 entraba a formar parte oficialmente de esa banda ocupando el espacio que
dejaba un tal Peter Green y
a los 20 entraba a formar parte de otra banda británica liderada por un tal Mick
Jagger y un tal Keith Richards llamada The
Rolling Stones. Hablamos de un tal Mick Taylor, probablemente
el mejor guitarrista en la historia de la banda londinense y una de las figuras
más precoces en la historia de la música popular.
Consiguió
semejantes méritos a tan tierna edad acompañándose casi siempre en sus primeros
años de una Gibson Les Paul Standard de finales de los 50 con
el mástil bien ancho, detalle que sigue apreciando ahora que ronda los 70 años
de edad. Poco más tarde se hizo con su segunda Gibson Les Paul Standard, esta
vez una del año 59, pero no una cualquiera sino la mismísima Les Paul del 59
que Keith Richards llevaba años usando y que unió a los dos guitarristas por
primera vez aunque esta vez tan solo fuera para una transacción y no para hacer
alguna de las genialidades de discos como Let
It Bleed o Exile On Main Street.
Más tarde
comenzaría a coquetear con otro de los modelos que le han acompañado desde los
años 60, la Gibson SG Standard, alguna de ellas con el Bigsby
instalado y con la que por cierto solía tocar bastantes partes de slide con los
Rolling Stones. Por ejemplo es la guitarra principal de Taylor en un disco tan
mítico como el directo 'Get yer ya-ya's out'. Es otra guitarra con el cuerpo
muy ligero pero el mástil bastante ancho lo que nos da una pista bastante clara
de las preferencias a la hora de tocar del señor Taylor.
Otra
curiosidad de su equipo son las cuerdas que monta ya que usa una especie de
juego híbrido, con cuerdas ligeras en las primeras cuerdas y de bastante más
grosor en las entorchadas. Según el propio Taylor su tercera cuerda es un .017
y su sexta un .052.
Actualmente
se le ve bastante cómodo tocando algunas de sus Fender Stratocaster,
modelo que adora, como casi todos nosotros, por la versatilidad que te da. Pero
afirma también que nunca ha dejado ni dejará de usar sus viejas Les Paul y
otros modelos de Gibson como por ejemplo la Gibson ES-335 que
ya usó bastante en estudio en su etapa con sus satánicas majestades.
Estas son
las algunas de las guitarras más representativas de un tipo que a los 25 años
ya estaba de vuelta de todo y había vivido varias vidas concentradas en unas
pocas giras; alguien admirado por el gran público y, aún más importante, por
los grandes artistas de su generación, habiendo colaborado con músicos de la
talla de Dylan, Jack Bruce o John McVie entre
otros muchos, un tipo que decidió dar un paso a un lado después de caminar por
el lado salvaje de la vida quizá demasiado pronto. Decidió alejarse de los
excesos y abandonar la banda más grande del planeta en el mejor momento de su
carrera y probablemente todo por una única razón: los muertos no tocan la
guitarra.